18 abril 2011

MOSAICO en Padova, Italia

Mosaico es un formato de impro que me pertenece, hasta  que lo juegan otros. 
De Mosaico lo que me gusta es que abre caminos para que cada uno muestre su propio imaginario, posibilita que el improvisador haga lo que desee hacer en un escenario, comparta aquello que sienta la pulsión y la curiosidad de compartir. 
Como la libertad también es un verbo que no siempre sabemos conjugar, para los jugadores de Mosaico a veces la posibilidad se lee como dificultad, la falta de sendero no se toma como campo abierto a la decisión de cada paso, sino como desierto agobiante. Hasta la técnica de Impro puede ser una cárcel, cómoda y amplia, pero cárcel al fin. Es natural, lidiar con grandes apéndices en la espalda es pesado y molesto... recién cuando descubrimos que son alas, levantamos vuelo.


  • Sucesivas escenas de vínculo entre dos,  que proponen y exigen la contundencia del relato breve, y suponen un tratamiento de unidad, no de tránsito (como suele ser en la impro clásica, donde cada escena es un eslabón, ordenado o no, dentro de una anécdota).
  • Micromonólogos que interrumpen y fragmentan, dando profundidad y justificación al mosaico. 
  • Trabajos corales en donde asoman experimentos a partir de lo aprendido en el taller de soundpainting con Walter Thompson. 
Ésto es Mosaico, un collage de recursos escénicos que se se hace formato. Retazos de estos recursos los compartí en mis talleres en Argentina, Chile, Brasil, Portugal, México, distintas zonas de Italia y más... en breve en Nancy, Francia. 
Se compone así un montaje que bien me gustaría jugar, y periféricamente jugaré el 1º de mayo en Padova, Italia, con un elenco amateur de la asociación Cambiscena.

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